San Ignacio, un rincón invernal en Sinaloa, se transforma en un atractivo turístico con su encanto nevado.
San Ignacio, Sinaloa, 15 de octubre de 2024. En el sur de Sinaloa, San Ignacio se destaca como un pueblo mágico que durante el invierno se transforma en un escenario nevado, especialmente en las zonas cercanas a la Sierra Madre Occidental. Este encantador rincón se ha convertido en un atractivo turístico para quienes buscan disfrutar de un ambiente invernal, con destinos como el Ejido California, cerca de Durango, y Surutato, conocido por sus cabañas acogedoras y sus bosques cubiertos de nieve.
Aunque la nieve es más habitual en la Sierra de Badiraguato, cada año crece la expectativa por ver a San Ignacio cubierto de blanco, convirtiendo su paisaje en un espectáculo singular.
Un viaje a la historia y cultura de Sinaloa
San Ignacio fue fundado en 1633 por el jesuita Diego González de Cueto y, anteriormente conocido como Piaxtla, posee profundas raíces indígenas. A lo largo de su historia, ha sido hogar de diversas comunidades como los piaxtlas, totorames y xiximes. Hoy, San Ignacio deslumbra a los visitantes con su rica herencia cultural y sus paisajes cautivadores.
El pueblo combina atracciones coloniales y naturales, rodeado de museos, iglesias y ríos. Entre sus tesoros históricos se encuentra la zona arqueológica de Las Labradas, famosa por sus petroglifos, y el Museo del Jaguar, el primero en México dedicado a este emblemático felino.
Imprescindibles de San Ignacio
San Ignacio no solo ofrece paisajes nevados, sino también una variedad de actividades. Los visitantes pueden explorar el Museo de la Cultura Popular y el Museo Comunitario, además de disfrutar de la gastronomía local, que incluye platillos como el aguachile y el pescado zarandeado. No olvides probar la capirotada, un delicioso postre de la región, y subir al Cristo de la Mesa, una impresionante escultura que brinda vistas panorámicas del pueblo.
Para los amantes de la naturaleza, el Callejón del Beso y la Plazuela de la Constitución son paradas obligatorias, así como Barras de Piaxtla, un paraíso para los surfistas.
San Ignacio invita a los viajeros a descubrir su encanto invernal, un destino único en el corazón de Sinaloa que, con sus paisajes nevados y su rica historia, promete una experiencia inolvidable.